9 de abril: "Esto es un carnaval"

Brasil sufrió un nuevo récord de fallecidos por coronavirus en un día: 141. El total llegó a 941.
Italia superó los 18.000 fallecidos registrados oficialmente, entre ellos 100 médicos. España superó los 15.000.
El estado de Nueva York también alcanzó un nuevo máximo diario: 799 personas. La ciudad de Nueva York contrató una dotación extra de sepultureros. Datos oficiales muestran que el virus es más letal entre la población afro e hispana, que entre los blancos.
“Eso me enfurece mucho. Es repugnante y preocupante”, dijo el alcalde Bill de Blasio. La diferencia estadística sería explicada por desigualdades económicas que afectan el acceso a los servicios de salud.
La historia de uno de los muertos hispanos, el taxista mexicano Sergio Andrade, que vivía en Brooklyn, fue contada por el periódico latino El Diario. Andrade ni era anciano ni tenía enfermedades previas: había cumplido 34 años y era sano.
En Ecuador, la fiscalía inició una investigación por denuncias de que funcionarios hospitalarios estarían exigiendo dinero para entregar a las familias los muertos por coronavirus.
La alcaldía de San Pablo, en Brasil, ordenó comprar 5.000 bolsas para cadáveres ante el incremento de decesos, afirmó el titular del Sindicato de Empleados Municipales a la agencia Ansa. El sindicalista denunció una "subnotificación" en el número de víctimas de la enfermedad.
El parlamento español votó extender el estado de emergencia hasta el 25 de abril.
Loncopué, una localidad de 6.000 habitantes en Neuquén, será cerrada por cuatro días, desde el viernes a las 13 hasta el martes, para intentar controlar un brote de la enfermedad, que se inició en un asado que se hizo violando la cuarentena y que ya provocó dos muertos, 20 casos confirmados de la enfermedad y 60 personas que esperan los resultados del test.
"Hay gente que no respetó la cuarentena y nos provocó un desastre", afirmó el intendente Walter Fonseca, al sitio LM Neuquén.



Más de 6.000 personas han sido detenidas y 2.000 autos decomisados en Honduras por incumplir el toque de queda declarado hace tres semanas y ampliado hasta el 19 de abril, informó la agencia Efe.
Taiwán donó un millón de mascarillas para España e Italia.
El primer ministro británico Boris Johnson dejó el CTI, aunque continúa hospitalizado.
En Bogotá familias que no tienen lo que comer debido al confinamiento comenzaron a colocar trapos rojos en su ventana, como signo de que necesitan ayuda desesperada, según consigna un informe de la agencia Reuters.

También en Colombia, policías bailan y enseñan zumba para distraer a los vecinos que están sin salir de sus apartamentos.
En Brasil, unos 2,6 millones de personas cobraron por primera vez los 600 reales mensuales (unos 118 dólares) con los que el gobierno prometió auxiliar durante un trimestre a 60 millones de trabajadores informales, desempleados y microemprendedores.
Más de 16 millones de estadounidenses perdieron su empleo en las últimas tres semanas, informó el Departamento de Trabajo.
Debido a que hay muchos incumplimientos, el gobierno boliviano anunció que colocará tobilleras a los obligados a guardar cuarentena en La Paz.
El ministro de Defensa de Bolivia, Fernando López, criticó a los habitantes de Santa Cruz por no respetar el aislamiento social. "Lo que está pasando en la ciudad es realmente vergonzoso y después nos estamos quejando de los números (...). Esto realmente es un carnaval (...) No nos estamos dando cuenta que esto está matando a familias y que las familias no pueden enterrar ni siquiera a sus muertos, ni siquiera pueden despedirse".
Por primera vez, el ministerio de Agricultura de China no incluyó a perros y gatos en la lista oficial de animales comestibles, informó la agencia Ansa. La decisión sigue a otra tomada en febrero que prohibió el comercio y consumo de animales salvajes. Se cree que el coronavirus pudo originarse en la venta de murciélagos como alimento.
Mientras tanto, Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID) e integrante del comité científico de la Casa Blanca, dijo a The Wall Street Journal que nunca más habría que saludar con un apretón de manos: "No creo que debamos volver a estrecharnos la mano nunca más, para ser honesto. No solo sería bueno prevenir la enfermedad por coronavirus; probablemente disminuiría dramáticamente los casos de gripe en este país".

coronavirus
Anthony Fauci y Donald Trump

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